1º de MAYO.

Mucho tiempo ha pasado desde aquel 1 de mayo de 1886 que desembocaría en los sucesos de Haymarket tres días después, parece que la lucha por la jornada de 8 horas vuelve a estar tan al día como entonces, debido en gran medida a la “involución” que se ha producido de los derechos de los trabajadores. Una gran pérdida de estos derechos se ha visto aumentada por una reforma laboral demoledora para los trabajadores españoles y por tanto para la casi totalidad de la sociedad española, nosotros no vamos a señalar esta reforma como la única responsable, ya que pensamos que esta es un paso más en el camino que ya a finales de los años ochenta  se empezó a producir con la deslocalización de empresas, continuo con la ola de privatizaciones de los años noventa  y  desde mediados del dos mil  con reformas del mercado de trabajo para adaptarlo al modelo productivo que conviene a los grandes capitales.

Nuestra denuncia concreta es contra una reforma laboral que ni crea empleo y hace que se pierdan derechos y por tanto que se pierda la dignidad, pero de manera general es una denuncia a un sistema que está obsoleto y no funciona, la situación de crisis que por otro lado se ha creado de manera ajena a la sociedad, no es la escusa para que se ataquen derechos fundamentales como el trabajo o la vivienda.

Por ello nuevamente, algunos miembros de Libertas Toledo han salido a la calle para reivindicar la lucha por unas condiciones de trabajo dignas, acordes con el S.XXI que no las que se imponen que son condiciones de trabajo más propias del S.XIX.

REFORMA LABORAL

NI TRABAJO, NI DIGNIDAD